lunes, 31 de octubre de 2011

Veinte años de confesiones de Iván Ferreiro.

Una cúpula que por dentro parecía un iglú y por fuera una tortuga rosa (¿a quien se le ocurrió la feliz idea de que aquello pareciese un club de alterne pijo?) fue la encargada de albergar el inicio de gira de ese tipo bajito de Vigo que a todos nos ha hecho llorar alguna vez con sus canciones.

Tres días después de la salida del nuevo disco, Iván Ferreiro presentaba sus ‘confesiones de un artista de mierda’ en la Cúpula del Milenio de Valladolid el pasado 21 de Octubre. A eso de las 9 y 10 apagaron las luces (rosas), salieron al escenario Amaro Ferreiro, Pablo Novoa y el resto de los músicos, y por último Iván, con su habitual copa de vino (vaso de plástico en este caso, parece que la tortuga gay no es tan glamourosa como pensábamos), una sudadera y una bufanda que le duraron media canción, una sonrisa enorme y muchas ganas de tocar. Aunque para ganas, las que tenía(mos) el público. A los primeros acordes de ‘Toda la verdad’ la gente se volvió literalmente loca.
“Quiero dedicar este concierto a la paz, y que a partir de ahora la violencia en este país solo exista en los videojuegos, en los cómics, en las películas, en los libros…y en las canciones”. Con estas palabras presentó ‘Fahrenheit 451’. Siguió con un repaso de los mejores temas de sus discos en solitario, como ‘Extrema pobreza’, ‘Ciudadano A’, Jet lag’, ‘Rocco Sigfredi’ o ‘NYC’, intercalándolos con temas de los Piratas como ‘Tio vivo’ o ‘Santadrenalina’, y un tema nuevo de ‘Confesiones…’, ‘Mi munchausen’. Pero sin duda dos de los temas más coreados fueron ‘Promesas que no valen nada’ y ‘Años 80’. Dos himnos que forman parte de la historia del pop de este país, de esos que gustan tanto a tu madre como a tu vecino indie-moderno-gafapasta o a tu amiga reggaetonera.

Pero Iván también interactúa con el público: “¿Os está gustando?” “¿Os lo estais pasando bien?” “¿Qué nos estamos perdiendo hoy en la tele? ¿El Deluxe, no?”. Y efectivamente, la gente se lo pasa bien. Canta cuando hay que cantar, escucha cuando hay que escuchar y se ríe cuando Ferreiro quiere provocar la risa con alguno de sus característicos gestos. Se acerca el (falso) final del concierto, con la perfecta ‘Turnedo’, versión dvd (parecía que en cualquier momento iba a salir Xoel López y a algunos nos entró ansiedad) y ‘Mi furia paranoica’. No pasaron ni dos minutos y salió Iván, esta vez solo, para interpretar al piano dos temas de ‘Picnic extraterrestre’, ‘Paraísos perdidos’ y ‘Relamida’, y una de las canciones más bonitas de Piratas y del mundo en general, ‘M’.
Y ahora si que se acerca la recta final del concierto. Una preciosa ‘SPNB’ con Amaro a la guitarra, y ya con la banda al completo ‘Te toca tirar’, ‘El equilibrio es imposible’, ‘Días azules’ y ‘Mi coco’ cerraron la noche.

A estas alturas nadie puede decir que Iván Ferreiro no es uno de los mejores escritores de canciones que tenemos en este país. Ni pop, ni rock, ni indie. Nada de etiquetas. Canciones, que al fin y al cabo es lo único importante en esto. Canciones para el tiempo y la distancia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encanta tu blog y esa frase del final. Canciones para el tiempo y la distancia. :D